Violencia



Si en la anterior entrada os demostramos que la democracia es solamente una ilusión óptica, una forma de enmascarar el férreo control de la vida pública y privada que ejercen los poderes económicos, esta vez retrocedemos a una forma aún más burda de control.

Hoy, día 30 de mayo, pasada la media noche, podíamos leer este tweet de @salvanimadoras:

"Sarkozy, la mitad de un hijo de puta, hace lo que sabe hacer:
pegar a la gente y llenar a Carla Bruni de mierda."

Vaya, un usuario tan moderado como el redactor en jefe de este blog (^__-) insulta al presidente de la República francesa y a su esposa en público. Eso nos sorprendió tantísimo que no pudimos sino investigar la causa de este alarde de bilis, de sentimientos tan crudos, de esta falta de flema de nuestro tranquilo líder en funciones.

Vamos a empezar por el final. Ayer, 29 de mayo, al caer la tarde, la redacción al completo de Salvando animadoras se encontraba en una asamblea clave para la acampada del Movimiento 15M de Málaga, que finalmente decidió su propia continuidad, eso sí, con un sistema de turnos para que los que llevan ya dos semanas allí puedan descansar. Mientras tanto, varios usuarios avisaron a los organizadores por Twitter (creednos, todo está allí) de lo que ocurría a casi dos mil kilómetros:


Miles de personas, en apoyo a la llamada Spanish Revolution, se concentraban en la plaza de la Bastilla de París, símbolo de la Revolución francesa y de los principios de libertad, igualdad y fraternidad de esta república. Los antidisturbios atacaron a los manifestantes con porras y gases lacrimógenos hasta hacer desaparecer la protesta. No iban a consentir que la inmaculada capital del reino de Sarkozy y Carla Bruni se convirtiera en un lodazal, en un Woodstock lleno de perroflautas instalados en microclimas en las plazas principales, auténticos bolcheviques pidiendo democracia participativa y limpieza de la vida pública.



Hasta ahí podíamos llegar. Francia no es España. No está llena de políticos ingenuos y timoratos que tienen miedo de sus sombras y que nunca ordenarían el restablecimiento del orden si eso les costase un solo voto, sin saber que la gente de bien siempre vota y que los desarrapados se quedan en casa viendo cómo crece la hierba. Vive la France, le vin et le gaz moutarde.

Ese mismo día por la mañana, de nuevo en la maravillosa red social de los ciento cuarenta caracteres, las animadoras tuvieron la siguiente discusión con un tal @djgnomah (vaya nombre), de formación y ortografía exquisitas e intenciones libres de toda sospecha, a vueltas con las semejanzas y las diferencias entre nazismo y extrema derecha. Disfrutad:

Metaconversación con un fascista. ¿Quién intoxica?

Os preguntaréis por qué las animadoras se metieron, un domingo por la mañana y con la que está cayendo, en tal cantidad de fango.

El sábado 28 de mayo, el Fútbol Club Barcelona ganó una importante competición europea, pero nos estamos retrotrayendo un poco más de la cuenta. Las animadoras, que se pasaron la noche en vela (nunca duermen), leyeron el siguiente tweet de @acampadamlg (Twitter oficial de la acampada situada en la malagueña plaza de la Constitución):

¿Qué es la extrema derecha?

Minutos después, @acampadamlg se volvió a dirigir a sus seguidores:

Qué tiene la ultraderecha que me vuelve loco, ay que
me vuelve loco

Un grupo de violentos de estética y actitud habitualmente relacionados, que Dios nos perdone, con la  ultraderecha (por provocar, provocaron hasta la discusión anterior), se había paseado por la plaza increpando a los indignados y desfilando. No eran más de diez individuos, según pudimos recabar en la asamblea de ayer, pero tuvo que presentarse la policía para proteger a los ciudadanos reunidos de manera pacífica. En este caso, los servidores públicos tuvieron la inteligencia de hacer su labor. A partir de este incidente, estuvimos atentos a la etiqueta #acampadamálaga, como no podía ser de otra manera, y nos encontramos con esta prenda del usuario @iumba_1, que retiró su nombre, Álvaro Villodres, del perfil de Twitter después de hacer gala de tamaña elegancia, de un talante tan democrático que deja en ridículo a los acampados:

Hay gente muy cabreada.

Suponemos que de estos polvos vienen los lodos de más arriba. No estábamos acampados en la plaza de la Constitución, ni vimos a los fascistas desfilar y proferir insultos a los indignados, pero no creemos que superaran el odio que encierra este tweet. Siempre preferimos vuestro juicio, pero hoy hablamos de odio y, claro, de violencia.

Volvemos a la noche del 28 de mayo. El Barça ganó su partido, y los aficionados que se concentraban en el Arco del Triunfo se dirigieron, junto con los que vieron el partido en casa, a la fuente de Canaletas, típico lugar de celebración y de disturbios. Pronto, según la versión oficial, hubo destrozos que provocaron la intervención del cuerpo de Mossos d'Esquadra, sobre los que pronto nos extenderemos:



El vídeo anterior muestra el punto de vista de los acampados, que observaban la carga policial marcando el límite de la concentración para separarla de la celebración deportiva. En la descripción nos hablan de sus sospechas de que los supuestos radicales que habían provocado los disturbios fueran mossos disfrazados. En el Telediario del día 29 hablaron de agentes de paisano que tuvieron que apoyar a sus compañeros usando "pequeñas porras de plástico" (llamadas kubotan, de uso frecuente entre agentes de policía a pesar de estar prohibidas) contra los violentos. Nos preguntamos quiénes empezaron los disturbios, máxime teniendo en cuenta los incidentes de la mañana del día anterior.

El viernes, día 27 de mayo de 2011, los servicios de limpieza del Ayuntamiento de Barcelona se presentaron en la plaza de Cataluña para limpiarla y retirar todo el material inflamable (butano para cocinar y gasolina para los generadores) o contundente (los palos de los tenderetes de la acampada, las mesas y las sillas) que pudieran provocar problemas durante la celebración de un probable triunfo del Barcelona en el partido del sábado. Ante la negativa de los concentrados a levantar el campamento, lo que en la práctica les estaban pidiendo, los antidisturbios del cuerpo de Mossos d'Esquadra procedieron al desalojo usando la fuerza, esta vez porras y pelotas de goma, contra los acampados. Incluso pudimos verlo en Antena 3, ya sabéis, ese canal de televisión de extrema izquierda. Sin embargo, preferimos el punto de vista de los violentos que pararon las porras y las balas de goma con los dientes:






Los mossos no iban correctamente identificados. De hecho, no iban para nada identificados:

–Apunta el número de placa.
–Vaya, no lleva.

Tampoco, como habéis podido ver en los vídeos anteriores, se identificaron cuando los ciudadanos se lo solicitaron. Un ejemplo de cuerpo de policía democrático que protege a los ciudadanos de los abusos. Algunos de sus miembros se retrataron en sus cuentas de Facebook (hay una página dedicada a un tal Ferran Teruel, cuya cuenta podéis consultar en la caché de Google), ya por la tarde:

Parecen delincuentes, pero son mossos sueltos en Facebook.

El consejero de Interior de la Generalitat de Cataluña, Felip Puig, de CiU (podéis encontrarle en su cuenta de Facebook, o en su email, felip.puig@parlament.cat), que ordenó el desalojo, declaró aquella tarde que el uso de la fuerza fue absolutamente necesario ante la negativa de los acampados a marcharse (es decir, o te levantas o te parto los dientes con la porra), y que volvería a actuar de la misma forma. Desde entonces, en todas las acampadas se pide el cese fulminante del consejero (podéis firmar la petición aquí), y el equipo legal de Acampada Sol estudia una demanda penal contra este energúmeno.

El hashtag #felipfuig (Felip, huye) ha sido trending topic en Twitter durante todo el fin de semana, superando en muchos momentos a la final de la Champions League, y miles de personas acudieron a las manifestaciones de la tarde del día 27 de mayo para apoyar a los desalojados. Nadie usó la violencia en ninguna de esas protestas, que se desarrollaron con normalidad y ambiente festivo. La convocatoria de Málaga, que volvió por la senda de la batucada e incluyó a los vecinos del distrito Palma-Palmilla, fue en todo momento ejemplar en su desarrollo, e igual de multitudinaria que la del día 20 de mayo, o que la del 15:



¿Veis lo violentos que son nuestros indignados?

La Razón, diario de los paladines de la democracia, nos regaló el titular "Los indignados enseñan los dientes y provocan graves altercados". Es posible que nos hayamos vuelto más tendenciosos de tanto mirar golpes, pero en ninguno de los vídeos que hemos podido ver, y hemos visto muchos, hay ciudadanos mostrando una actitud violenta. En todo momento, la actitud de los acampados fue la de apaciguar, enseñando las manos para tranquilizar a los mossos, que sí que intentaron provocarles con palabras primero y con golpes después, sin encontrar una respuesta violenta.

Max Mosley intentó ingresar en los Mossos
antes de su famosa orgía nazi.
El saldo de los incidentes fue de ciento veintiún heridos, de los cuales treinta y siete, según la cifra oficial, eran policías. Por mucho que vemos las imágenes, no encontramos el momento en el que casi cuarenta agentes son agredidos por los manifestantes. La Consejería argumenta que eran policías de paisano que acudieron como refuerzo. ¿Desde cuándo se usan agentes de paisano como antidisturbios? ¿Tienen los Mossos d'Esquadra la tradición carnavalesca de disolver disfrazados concentraciones pacíficas? Y, lo más importante, si los mossos se golpearon mutuamente, ¿es el sadomasoquismo una práctica corriente en este honorable cuerpo de seguridad? Estas y otras preguntas pertenecen, como la Santísima Trinidad o la Cherry Coke, a la categoría del misterio.

El relato de los hechos ocurridos durante este fin de semana es suficiente para que todos saquemos nuestras propias conclusiones, que podrían tener cabida en los comentarios. No obstante, en este blog exponemos la opinión de personas muy concretas, conque vamos, como diría aquel, a la parte carnosa del muslo.

En primer lugar, la actuación de los antidisturbios en París y en Barcelona es un delito, cometido por figuras de autoridad y ordenado por miembros del gobierno de turno, pero no menos doloso. Los agentes de policía, en una democracia, no pueden actuar contra los ciudadanos que, amparándose en el derecho de reunión, se sientan de manera pacífica en una plaza pública sin provocar altercados. Otra cuestión es si estamos o no estamos en una democracia.

En segundo lugar, los miembros de las unidades antidisturbios cometen también un delito actuando sin identificación y negándose a identificarse ante la petición de los ciudadanos, que no pueden presentar la denuncia correspondiente por lesiones al no conocer ningún dato de la persona a la que van a denunciar. Esto es así en un Estado de derecho, pero deberíamos hacernos, de nuevo, la pregunta del párrafo anterior.

El kubotan es un arma muy común entre miembros de
paisano de los cuerpos de seguridad.
En tercer lugar, los agentes de paisano no deben ocupar el espacio público en una intervención, ni en el ejercicio de sus funciones ni a título personal. Eso solo puede generar confusión y provocar más altercados. Otra cosa es que ese sea el objetivo de su presencia, o que una supuesta presencia de policías de paisano sea una coartada para presentar partes de lesiones que serían imposibles con los pertrechos propios de los antidisturbios.

En cuarto lugar, la actitud violenta de ciertos agentes de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, como Ferran Teruel, es intolerable en democracia y debe ser perseguida. Los sádicos como él deben de estar en un psiquiátrico, no en la calle, y mucho menos con armas y uniformes. Todos sabemos que los miembros de de estas unidades de intervención policial no son los de la brigada canina, pero estos individuos podrían pertenecer a las SA, y no es una broma de Lars Von Trier.

En quinto lugar, queda claro que los comportamientos violentos vienen de ciudadanos, como nuestros queridos usuarios de Twitter; policías, como los que podéis ver en los vídeos y cuentas de Facebook que hemos mostrado; y gobiernos, como el de Artur Mas y Nicolas Sarkozy, de carácter nacionalista cuando están de buen humor y filofascista cuando se trata de lo que les disgusta, que hacen mención expresa o implícita del odio en sus actuaciones y discursos, y que no dudan en aplastar, en limpiar la calle de personas que se atreven a mostrar la actitud totalitaria y antidemocrática de pedir juego limpio y democracia real en las plazas de nuestras ciudades.

En sexto lugar, un funcionario con una responsabilidad tan notable como la Consejería de Interior no puede seguir en el cargo tres días después de ordenar el uso de la fuerza contra ciudadanos que simplemente se sientan en una plaza. Felip Puig ha demostrado un comportamiento psicópata, y debe ser inhabilitado, sin perjuicio de las acciones penales que sus actos puedan acarrearle. Cada segundo que pasa en el cargo es una afrenta para el resto de los catalanes, para todos los ciudadanos del Estado. La actitud de Puig es una perversión de instituciones que, ya impregnadas de totalitarismo (al consejero lo elige el presidente con su dedo presidencial), son la infección que este movimiento quiere erradicar. Esa es la verdadera razón de la violencia, que no es más que el último recurso del poder cuando no tiene razón de ser. Última noticia. Después de apagar las cámaras de tráfico durante la mañana del viernes 27, Puig, que nos toma por idiotas, quiere convertir a los mossos en ciberpunks con cámara incorporada:



Esto es lo que nos toca aguantar. La realidad supera a la ficción.

Por último, nos gustaría dejar claro que el terror, aparte de consideraciones de índole moral, no hace sino dar fuerza y razón de ser a las protestas. Si, tras su desalojo, la concentración en Sol pasó de varios cientos de personas a varios miles, tras las cargas policiales de este fin de semana, todas las asambleas de las plazas han decidido continuar con las acampadas, que estaban a punto de disolverse para transformarse en asambleas de barrio.

Asamblea de Acampada Málaga. 29 de mayo. Como podemos ver, no había más que perroflautas.

Según nuestra cita favorita de Mao, cuanto mayor es el caos, más cerca está la solución. En otras palabras, se nota que hay mucha gente cabreada. Es hora de aguantar.
¿Eins?

Sobre las animadoras

¿Quién no quiere salvar a una animadora?
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