Falta un día

Senadores

Hoy, día dos del año once, tenemos dos cosas en mente. En primer lugar, queremos recordaros que mañana comienzan las negociaciones entre el PP y el PSOE para una nueva Ley Sinde. Esto es como el referéndum de la Constitución europea. O gana el sí, o lo repetimos. En este caso, se impuso la lógica en el Congreso, contra todo pronóstico, y el Partido Socialista (sic.) insiste en el Senado.

El caso es que, cerrada la puerta de otros grupos parlamentarios como CiU y PNV, cuyas exigencias desbordaron las expectativas del Gobierno, lo único que les queda es negociar con el PP. En principio hay voluntad de negociación en este partido. También viene siendo habitual ver a un PP abriendo la mano al Gobierno para después estrangularle a traición. Eso es lo que tenemos que aprovechar.

En la entrada que escribimos el 29 de diciembre tenéis una lista de senadores del Grupo Popular e instrucciones sobre lo que sería deseable hacer con ella. Para el que acabe de llegar, sugerimos un email. Hemos incluido el que vamos a enviar desde esta redacción un poco más abajo en esa misma entrada. No hay excusas. Parar esta ley es complicado. Sabemos que hay muchos intereses implicados, y que no son los nuestros.

Pero también sabemos que, entre apoyar a este Gobierno, ya en las últimas, y marcarse un tanto ante la ciudadanía, los ilustres y pijines senadores que tienen marcado el éxito hasta en la raya del pantalón pueden inclinar la balanza a nuestro favor, al menos mientras estén en la oposición. Eso nos daría, por lo menos, un año más de libertad o, en palabras de Alejandro Sanz, de anarquía perversa. ¿Fácil, verdad? Pues que así sea. Un email al día a todos los senadores de este grupo parlamentario durante toda la semana que viene (desde mañana), o mientras duren las negociaciones. Dejamos la puerta abierta a acciones más contundentes si se hacen necesarias, pero esta labor informativa es esencial en un principio.


Manifestaciones del ocho de enero

En segundo lugar, hay convocada una manifestación en Málaga (plaza de la Constitución) y en otras ciudades españolas el sábado día ocho a las cinco de la tarde contra la Ley Sinde. A las seis empieza otra en el mismo sitio a favor de WikiLeaks. Tácticamente, vemos dos manifestaciones tan cercanas en el tiempo y que parten del mismo punto un poco confusas. De todas formas, este tipo de convocatorias tienen todo nuestro apoyo. Hay que dejarse ver y no vivir solo en el ciberespacio. Deben notar que existimos, y que no somos nerds pegados a una pantalla, que andamos por la calle, damos nuestro punto de vista, que votamos. Y no votaremos a ningún partido político que apoye una ley, se llame como se llame, que acabe con nuestra libertad, en la Red o fuera de ella.

De modo que, el día ocho, hay que dejar los juguetes de los Reyes Magos en casa y pasarse por las manifestaciones, a ver qué se cuece, cómo respira la gente que opina igual, o distinto, que nosotros. Ya hemos dicho bastantes veces que aquí no somos anónimos, pero, como ellos, tampoco perdonamos ni olvidamos.


Promover iniciativas como los emails al Senado y participar en otras como una manifestación analógica nos llena de orgullo y satisfacción, como al Rey en Navidad. Parece que algo se mueve. Esta ley ha despertado en le gente todo lo que no ha podido despertar el tremendo recorte de derechos que llevamos puesto ya desde el año pasado.


La calle, como la guerra de la información, es nuestra.

Falta un día.

¿Eins?

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